By SuperFernández
Sentenciada la primera jornada de la segunda vuelta el Real Madrid de Mourinho sigue líder y, además, amplía su ventaja con el segundo clasificado, el Barcelona, a siete puntos. La cosa fue fácil: los blancos ganaron y los blaugranas empataron. Entre medias, mil y un análisis.
Sentenciada la primera jornada de la segunda vuelta el Real Madrid de Mourinho sigue líder y, además, amplía su ventaja con el segundo clasificado, el Barcelona, a siete puntos. La cosa fue fácil: los blancos ganaron y los blaugranas empataron. Entre medias, mil y un análisis.
La verdad que nadie lo esperaba, pero esta sonaba a jornada crucial. El Real Madrid jugaba contra el último, el Zaragoza; por su parte, el Barcelona hacía lo propio contra un Villareal venido a menos pero siempre peligroso. De fondo quedó el clásico del miércoles en copa, que dejó anímicamente mejor a los de la capital.
Pues bien, Mourinho debió pensar: “Si contra el Barça salió bien, por qué ahora no”; y sacó a los jugones. Así, saltaron al campo Granero, KaKá, Özil, Benzema, Cristiano, todos bajo la batuta de Alonso. Marcó el Zaragoza primero, pero nadie se puso nervioso. Antes del descanso empató Kaká, y tras el inicio de la segunda cayeron los goles de Cristiano Ronaldo y Özil. Fantásticos los dos.
Acabado este partido dio comienzo el del Barcelona, que saltó con: Pique, Puyol, Abidal, Alves, Adriano, Mascherano y Busquets; un total de siete jugadores de defensa. Nadie protestó, ni antes, ni después del partido. Y es que parece que el colonias nunca se equivoca para la prensa catalana. Al final, todo el mundo se puso nervioso, hasta Pep que se irritó y protestó al colegido todo cuanto quiso. Empate, a siete puntos y sin dar un palo al que se equivoca.
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