En los últimos grandes partidos del Real Madrid, la gran pregunta y la gran duda se encarna en las figuras de 10. Este parecía un tema ya acabado y sentenciado por incomparecencia de Kaká la temporada pasada, que acabaría con la victoria clara de Ozil, que no solo se mostraría en el campo; se reconocería desde el grupo de 23 entregándole el “10” blanco para que lo luzca en su espalda.
La victoria del turco-alemán parecía
tan evidente que se discutía la necesidad de tener a Kaká en el equipo e
incluso se le intento buscar una digna salida para él y para el propio club que
había desembolsado 65 millones dos veranos antes para traérselo de Milán. Al
final nada de nada, nadie en Europa creyó verse en la necesidad que hacerse con
un 10 ex balón de oro venido a menos por las lesiones en los últimos dos años.
Ricardo Kaká se quedaba en el Real Madrid y debía estar preparado para la
causa.
Ahora, tras dos meses de competición, podemos decir
que por fin se ha visto a un Kaká aceptable para disputar el puesto a Ozil. En
las últimas grandes actuaciones del equipo de Mou, el brasileño se encontraba
en el campo y en cambio Ozil, no se encontraba y cuando lo hacia parecía no
estar.
Mourinho ha intentado hacer todas las combinaciones
posibles, con la figura de un solo 10 en el campo, bien fuera con Kaká u Ozil y
alguna que otra vez con los dos juntos, siendo esta última la peor de las tres
opciones. Lo que ha quedado claro es que parece complicado ver a los dos en el
campo juntos, y no porque el entrenador no lo quiera si no porque no parece que
se entiendan, incluso la incursión de los dos parece complicar al equipo que se
pierde en distinguir a cual de los dos es el jugador al que darle la pelota.
La verdad, es que Kaká ha saboreado sus mejores
momentos en partidos de segundo nivel, en ninguno de ellos se le ha exigido y
con la calidad innata del propio jugador le basta para jugar contra ciertos
contrincantes de menor entidad. En cambio Ozil, demostró la temporada pasada y
esta en la supercopa estar en un nivel físico completo para enfrentarse a los
mejores jugadores y mejores equipos del planeta. Junto a esto, Mesut ha llevado
la manija de su selección durante los últimos años tras la Euro de
2010 y en cambio Kaká ha tenido que olvidarse de la selección Brasileña durante
todo un año.
El tema para Mourinho parece no ser fácil, si bien
últimamente apuesta claramente por Kaká, creo personalmente que su decisión
está tomada y en los partidos Top optará por Ozil y sus ojitos.
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