
by SuperFernández
En medio del desencanto de la sociedad española ante los psuedopolíticos que nos representa llega una noticia que acaba por estocar este día. Serán treinta segundos más en el bloque de deportes de cualquier informativo, media página en la prensa deportiva de mañana, una pequeña columna en la nacional, un teletipo en las agencias, y quizás, tan solo quizás un recuerdo en la programación deportiva de la medianoche de las radios nacionales. De la Peña se retira. Lo Pelat no dará más pases, no regalará más goles.
Lo último que recuero de Iván son sus dos goles al Barça, uno de cabeza, y otro de una vaselina tan bonita que nadie recuerda el fallo de Valdés. Cada vez que le veo por televisión, poco muy poco y siempre en las ruedas de prensa, añoro ese partido, pero no ya por lo goles solo, si no por la rabia de la celebración.
Hablar de Lo Pelat es hablar del último pase. Ese fue su arte, y ese fue su problema. Iván llegó a La Masia de Santander con 14 años, con 19 debutaba con el primer equipo, el Barça de Cruyf donde el domino del centro del campo era de Guardiola, y por tanto del toque horizontal, el pase vano hasta conseguir el hueco para dársela al delantero. Vamos, lo que tanto gusta a los entrenadores, dado que el riesgo de pérdida es casi nulo, y lo que tanto aburre a los aficionados. A De la Peña le aburría eso, buscaba al delantero con la mirada, y si esté no se movía aguantaba el balón él mismo, esperaba la subida del lateral, amagaba el disparo desde la frontal, y cuando el defensa se tapaba sus nobles partes él miraba y le daba el balón al lateral y este, si era bueno, centraba al nueve.
Cuando Ronaldo llegó al Barcelona no le gustaba jugar con Pep, no entendía su juego. Ronaldo se desmarcaba una vez si, otra también, entre los centrales, entre el central y el lateral, entre el mismo y el mismo, pero Guardiola no se la daba. No es que Pep le tuviera manía, es que Pep no arriesgaba, no concebía perder el balón tan pronto, prefería hilar la jugada perfecta. En cambio a Ronaldo le encantaba Iván, y a Iván le encantaba Ronaldo. A cada desmarque de R9 Lo Pelat veía el pase y lo intentaba, a veces funcionaba otras no. El arte no es una ciencia exacta, es más el arte simplemente no es una ciencia. Esa temporada De la Peña empezó de suplente con Robson y la segunda parte de la campaña acabo de titular. Esa temporada con Ronaldo e Iván el Barça ganó Copa del Rey de Fútbol, la Recopa de Europa, la Supercopa de España de Fútbol. Al terminar la Liga Ronaldo se iría al Inter y la siguiente campaña Iván se iría a La Lazio. Tiempo después cuando Ronaldo llegó al Real Madrid, le preguntaron con que jugador de la plantilla tenía más ganas de jugar con Figo, Raúl, Zidane, Roberto Carlos, y él respondió: Guti. Los genios se entienden solo entre ellos.
De la Peña no triunfó en la Lazio, tampoco en el Olympique de Marsielle, quizás le faltó su Ronaldo en esos equipos, figura que no es fácil de encontrar. Tampoco lo haría en un fugaz regreso al Barcelona.
Lo Pel
at encontró lo que él buscaba en el Espanyol, esa pieza fue el icono de la cantera perica Raúl Tamudo. Tanto en las temporadas 2002/2003 y 2003/2004 De la Peña llegó para salvar al Espanyol del descenso. Otra vez Iván tenía quien le entendía, Tamudo, como ya le pasaría con Ronaldo en el Barcelona. Iván y Tamudo llevarían al Espanyol de luchar por no descender a ganar la Copa del Rey en la temporada 2005/2006 y a disputar la final de la UEFA en la siguiente campaña. Raúl e Iván, Iván y Raúl como lo denominaba el Gran Guash “La sociedad perfecta”

En 2009 con la ayuda de Lo Pelat, a pesar de que ya tocaba a su puerta el calvario de las lesiones, el Espanyol conseguía salvarse tras una campaña con tres entrenadores distintos. Después de esa temporada las lesiones derrumbaron la puerta de Iván y el calvario llego a su cuerpo. Esta última temporada, ya sin Tamudo en el equipo, De la Peña tan solo ha podido disputar 32 minutos de liga contra el Villareal en el Madrigal.
Hoy Iván, ha anunciado que se retira del fútbol, que lo deja, que las lesiones no le permiten seguir dando más pases. "He pensado en operarme, pero creo que ya está. Mi cabeza quería seguir pero el cuerpo ha dicho basta. Es la mejor solución y ahora a disfrutar muchísimo". (Me recuerda a las palabras de Ronaldo esta misma temporada) Hoy Iván ha llorado porque sabe que probablemente, casi seguro, no podrá dar ese último pase al delantero. El fútbol a veces no es justo.
El próximo sábado, Lo Pelat, tendrá sus últimos minutos, sus ultimas carreras en el campo, y los aficionados del Espanyol que llenarán Cornellà-El Prat y los aficionados al fútbol que lo verán desde sus casas como yo esperaremos que Iván imagine y ejecute su último Pase de Gol.
Gracias De la Peña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario